La estructura de la ciencia
La gran mayoría de los textos de filosofía de la ciencia han sido escritos, como corresponde, por filósofos interesados o especializados en disciplinas científicas. Pero a partir de los años sesenta del siglo pasado algunos científicos profesionales empezaron a publicar sus ideas sobre la estructura y función de la ciencia. En esta obra, el doctor Ruy Pérez Tamayo señala que para un científico experimental interesado en la filosofía de la ciencia, que inició su carrera influido por el positivismo lógico, convencido de que los métodos y resultados de sus investigaciones eran lógicos y racionales y que, avalados por otros colegas, pasarían a formar parte de los conocimientos adscritos a una o más disciplinas, comprender el estado actual de la estructura de la ciencia es un empeño obligado y permanente, pues estaba convencido de que entre todas las formas posibles de conocimiento de la realidad la mejor y más confiable es la científica, ya que está basada en la razón, refleja objetivamente el mundo real (cuya existencia nunca hubiera puesto en duda) y nos acerca con mayor precisión a la verdad. Sin embargo, el repaso y la discusión de las principales críticas que ha suscitado la filosofía de la ciencia, expuestas en el curso de los últimos tres siglos desde David Hume hasta Alan Sokal, ayudan a fortalecer el quehacer científico.