Bellífica
Acentos bíblicos y resplandores proféticos se prodigan en este libro de José Natarén. Muy próximo a las enseñanzas de la Diosa Blanca a la que rinde tributo Efraín Bartolomé, así como a los prodigios relampagueantes de la existencia terrestre que dominan en la poesía de Óscar Oliva, Natarén arriesga poemas-síntesis que mezclan la cosmogonía de un nuevo Génesis con los ritmos destructores del Apocalipsis, el sueño mineral con el desarreglo de los sentidos, los furores del trueno con el silencio que acaba por sucumbir ante el propio Silencio... el pájaro incandescente que picotea en nuestras vértebras con la promesa de una
época en que ya nadie beberá los vinos del odre de la muerte. Todo este drama cósmico presidido por la figura amorosa de una mujer, que se transfigura en la bella de la zarza e impone el imperio de su Arquetipo que hace triunfar, a los ojos del amante, cabalista alucinado, un reino salvífico en que todos hemos de ser redimidos por la suprema gracia del
amor. Acaso el poeta, el verdadero poeta, se constituye en tal porque espera que regresen, y que regresen para quedarse, esos días vertiginosos... en que sólo sucede la Belleza.
¡Esperemos que así sea...