Reseña

Palestina es más que un territorio marcado por la ocupación; es un latido persistente, una herida abierta y, al mismo tiempo, un refugio de belleza discreta pero indómita. Estos cuadernos de viaje nacen de la estancia de la autora en Palestina entre 2007 y 2016, vistos bajo una nueva luz tras los sucesos más recientes. El cielo está incompleto es un collage de perspectivas y géneros literarios, una sinfonía de voces convertida en testimonio humano y visceral, donde el dolor de la opresión convive con la calidez de la hospitalidad, la poesía de la resistencia y la dignidad de un pueblo que se niega a desaparecer. Con la mirada atenta y una pluma conmovedora, la autora nos invita a recorrer con ella las calles de Ramallah; reconstruye para nosotros las llanuras de Cisjordania, los cerros de tierra roja, los olivares amados y los paisajes asediados de la Franja de Gaza. Las torres de control y los muros del apartheid no logran contener el olor del café árabe, la alegría nocturna de los bares, la complicidad y resiliencia de quienes se convertirían, para la autora, en amigos entrañables.
Esta edición actualizada resuena con más fuerza que nunca y nos recuerda que Palestina no es solo sufrimiento, sino también cultura, memoria y lucha inquebrantable. Más que un diario de viaje, Gardi Emmelhainz nos brinda un acto de solidaridad y un homenaje a quienes, contra todo pronóstico, siguen soñando con la libertad. Su relato es tanto una denuncia necesaria como una carta de amor a la tierra y a quienes la habitan.