Rosario Castellanos de Comitán a Jerusalén
Rosario Castellanos nació y murió de viaje. Cuando vino al
mundo, el 25 de mayo de 1925, sus padres, César Castellanos
y Adriana Figueroa, estaban en la Ciudad de México para
atender el delicado embarazo de la señora Castellanos. Sin
embargo, regresaron a Comitán poco tiempo después del nacimiento
de la niña Rosario, quien vivió ahí sus primeros dieciséis
años, hasta 1941, después de los cuales vino a residir
a la capital del país a consecuencia de la crisis que sufrieron
familias como la suya, dueñas de haciendas que fueron reclamadas
por los indios que exigían sus derechos apoyados por
el gobierno de Lázaro Cárdenas. Rosario Castellanos se estableció
en su ciudad natal hasta 1971, año en que fue nombrada
embajadora de México en Israel donde permaneció hasta
su intempestiva muerte el 7 de agosto de 1974.