El exprés de los apegos y otros cuentos
El exprés de los apegos no busca complacer a las masas ni cumplir expectativas ajenas: nace de un impulso íntimo y genuino, el simple placer de escribir. Su autor comparte recuerdos, reflexiones y vivencias que emergen en la soledad cotidiana, transformadas con un agudo sentido del humor y una ironía libre de amargura. Con lucidez y honestidad, celebra la memoria, el paso del tiempo y la libertad de pensar sin filtros.
Cada página es un ejercicio de autenticidad: escribir para vivir, para reír, para no olvidar. Sin pretensiones literarias ni afán de reconocimiento, estas letras existen para divertir a su autor y, acaso, a unos pocos lectores cercanos —sus hijos, nietos y amigos— que se asomen a estas historias tejidas con sinceridad y buen ánimo.
Más que un libro, es un testimonio personal: la afirmación de que la vida, incluso en su madurez, sigue siendo un territorio fértil para la imaginación, la risa y la palabra libre.