Antonio Vera Palestina, hombre leal
La historia no contada
José Antonio Javier Vera Palestina, mejor conocido como Antonio Vera Palestina, o, como siempre lo llamé en vida, don Antonio, cuenta por voluntad propia su historia, la que calló muchos años, la que parecía que nunca saldría a la luz por estar preso y haber sido condenado por muchos años a causa de un delito que nunca cometió, la que ignoraba si seguir callándola o relatarla descargando su conciencia, la que llevaba sobre la espalda, la que revelaba sus gritos en silencio: la parte desconocida de su vida, una historia sin contar. Referirse a Antonio Vera Palestina es referirse a su mejor amigo, Jorge Hank Rhon. Binomio indisoluble; artífices de una gran amistad, que estuvo a medio camino entre el servicio y la camaradería y de la que resultó una gran hermandad. De ninguna manera esta obra es una reconstrucción de hechos; tampoco, cumple un papel reivindicatorio, encomiástico o complaciente, ni mucho menos pretende faltar a la verdad o reescribir hechos que por sí mismos hablan. Simplemente, se trata de revelar el decir, el pensar, el sentir y el actuar de Antonio Vera Palestina. El legado que deja a sus hijos se condensa en estas líneas; es a su familia a la que don Antonio ofrece este testimonio de una vida azarosa y compleja, historia de un padre excepcional, de un ser humano de gran temple y corazón, de un amigo incondicional, de un hombre leal.